El Maestro en el Arte de Vivir
apenas distingue entre
sus obligaciones y sus aficiones,
su trabajo y su ocio,
su mente y su cuerpo,
su educación y su recreo,
su amor y su religión.
Él simplemente persigue su visión de la excelencia
en todo aquello que hace,
dejando a los demás que decidan
si está trabajando o jugando.
Para él, siempre está haciendo ambas cosas.– de un Budista Zen citado en
“Head to Head” por Lester Thurow,
Dean of M.I.T.’s Sloan
School of Management
Apenas llego a ser aprendiz, quizás algún día...
Visto en ludosofía
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